14/5/23

COPLAS SENCILLAS A LA VIRGEN MADRE









El fruto de tu vientre,

Virgen María,

cambia la tierra en cielo;

la noche en día.

 

Tu carne inmaculada

nutre la suya.

Llega a los corazones

el aleluya.

 

Eres tierra bendita

que el cielo labra:

cobijo maternal

de la Palabra.

 

Eres plata sencilla,

plata de luna.

Te haces para Dios Hijo

cálida cuna.

 

Las flores te sonríen

y las palomas

te regalan arrullos

cuando Le tomas.

 

Con milagro invisible

Le das a luz.

Otro parto te  espera

junto a la Cruz.

 

Dame, Madre, a ese Niño

de tus entrañas,

que pueden devorarme

las alimañas.

 

Recibe los detalles

de mi cariño:

cuanto soy Te lo entrego

para tu Niño.

 

Seré juguete dócil

para sus manos.

Le cantara mi gozo

versos humanos.

 

Con luz de tu mirada

y con tus besos

irá creciendo el Niño

sin retrocesos.

 

Enséñame a cantarle

que ya no quiero

vivir, si no Le sirvo

de campanero.

 

Mi pobre corazón,

poquito a poco,

aprenderá el oficio

de darse loco.

 

Loco de gozo inmenso

que lleva al hombro

las alforjas repletas

de azul asombro.

 

El Fruto de tu vientre,

Madre bendita,

hace de mi torpeza

luz manuscrita.