18/3/21

MÁS QUE SANTO, JOSÉ

Más que Santo, José; tu luz sencilla

edificó la casa nazarena.

Combatiste la sombra de la pena

para ser alegría sin mancilla.

 

Vino Dios de puntillas a la orilla

del hombre sepultado en la condena.

Sembraste el corazón y la azucena

con silencio de cálida semilla.

 

Sin hablar, pregonaste su cariño.

¡Dios hecho hombre! ¡Dios tierno Niño

que en tus brazos robustos se confía!

 

Fuiste silencio del asombro amante

y en la paz esponsal de tu semblante

reposaron los ojos de María.