Tu corazón sencillo
Se ha vestido de luz;
Declamas en silencio
La gran mirada azul.
Te apoyas levemente
En hilos de temblor
Y rezas su palabra
En múltiple color.
Tus pétalos son alas
Que en fragancia se dan.
Misionera en la brisa
Buscas la eternidad.
Te llamas Margarita
Te llamas Pensamiento.
Tu corazón invita
a los labios y al viento.
Deseas diluirte
en el gozo del hombre
ser luz en su palabra
dar a sus cosas nombre.
Hacer de su camino
paréntesis de amor
maternalmente arder
aromas y calor.
Tus pétalos, María
hacen tal esperanza
que quien se mira en ellos
también a Dios alcanza.
(Estrofas leves para la Virgen María)